Capítulo 290
Capítulo 290
Capítulo290
-¡Oh!
Un murmullo de asombro resonó en el público, seguido de aplausos más enérgicos y efusivos que
antes.
Rodrigo estaba completamente sorprendido y miraba a Alejandro con preocupación.
En ese momento, el hombre se mantenía imperturbable como una estatua de hielo, irradiando un
aura gélida y amenazante que parecía congelar instantáneamente a cualquiera que lo tocara.
Como si hubiera sido cuidadosamente planeado, un rayo de luz capturó su figura, como una burla
que llegaba desde lo alto, golpeándolo con fuerza.
Su rostro, notablemente apuesto, estaba pálido como un cadáver.
-Beatriz y Alex han sido amigos desde la infancia. Después de superar muchas pruebas y
tribulaciones, finalmente están a punto de formalizar su compromiso. La familia Hernández está
extremadamente emocionada por este hecho y queríamos compartir esta buena noticia con todos
ustedes en esta ocasión.
Ema apretó firmemente la mano de Beatriz, con un rubor en sus mejillas y un tono emocionado en
su voz que fluctuaba como si estuviera recitando poesía, como en una boda real.
Mientras tanto, Beatriz tenía se enrojeció y sus labios irradiaban una sonrisa tímida.
Miró a Alejandro en el escenario con una mirada llena de afecto, pensando que su expresión rígida
era producto de los nervios.
Mientras tanto, en otro lugar…
Clara estaba ocupada en la cocina, preparando postre para su abuelo y Noa.
-¡No está bien! ¡Algo malo ha sucedido, Cuñada! -Noa entró corriendo, su rostro completamente
pálido de miedo.
-¿Algo malo?
-El abuelo… el abuelo se ha desmayado! ¡El abuelo se ha desmayado! -Las lágrimas no se
hicieron esperar d en Noa mientras hablaba con urgencia.
-¿Qué?!
Clara sintió como si su corazón se detuviera por un momento. Abandonó la cuchara que tenía en la
mano y salió corriendo de la cocina.
En la sala de estar, Fernando estaba tendido en el suelo, con los ojos fijos en el techo como si fuera
a romperse en pedazos. Sus extremidades se retorcian y temblaban como si estuviera sufriendo
convulsiones. Su boca estaba torcida y babeaba.
Un escalofrío recorrió el cuerpo de Clara. Esto parecía ser un ataque agudo de apoplejía.
-¡Sr. Hernández! ¡Ya he llamado a la ambulancia, por favor, aguante, Sr. Hernández! -el secretario This is property © of NôvelDrama.Org.
Adrián, estaba al borde de las lágrimas.
-Adrián, ¡no se preocupe! ¡No permitiré que le pase nada al abuelo!
Clara se arrodilló junto a Fernando, comenzando a realizar medidas de reanimación con destreza y
profesionalismo.
Tanto Adrián como Noa quedaron atónitos. La diferencia en su conocimiento médico en
comparación con un profesional era evidente.
-Adrián, ¿las máquinas que usamos del abuelo están aquí? -Clara preguntó apresuradamente, el
sudor empapando su frente.
-¡Sí, están aquí!
-¡Tráemelas!
Clara inhaló profundamente, por la urgencia: -Es demasiado lento esperar a la ambulancia. Voy a
ponerle curación para aprovechar el tiempo.
¡Pelear con la santa muerte para salvarlo! ¡Es lo que mejor sabe hacer!
En la sala de banquetes.
La actuación conjunta de Beatriz y Ema llevó el cumpleaños a su punto culminante. Todas las
jóvenes damas de la alta sociedad miraban con envidia y celosamente a la mujer en el escenario,
que parecía una princesa aristocrática.
-¿En vidas pasadas, Beatriz estaba salvando a la humanidad o salvando al mundo? ¿Por qué tiene
tanta suerte? ¡Puede casarse con el Sr. Hernández, un hombre perfecto! Estoy tan envidiosa y
disgustada.
-¡Tsk! ¿Ves lo suelto que está su vestido? ¿Podria tener un hijo del Sr. Hernández? En las familias adineradas, ¿no es común este tipo de jugada para entrar en la familia adinerada?
-¡Uff, tienes razón! Cuando vi a Beatriz salir al escenario, pensé que su vestido no le quedaba bien. ¡
Eso es posible!
-¿Embarazada antes del matrimonio? ¿se aman? No es más que jugar sucio. Es repugnante.
-Si jugar sucio me permite casarte con el Sr. Hernández, ¡yo estaría dispuesta a ser una mujer vil
por una vez! ¡Esta es una gran victoria!