Resistiendo al amor de Mi Ex-Marido

Chapter 148



Capítulo 148

Dicho esto, el hombre le entregó un papel a Bella con algo escrito.

Claro que Bella no se atrevía a firmar algo sin pensar, así que mientras aceptaba el papel para relajar la guardia de ellos, metió la mano en su bolsillo para buscar su teléfono y llamar a la policía.

Justo en el momento en que tocó su teléfono, sintió repentinamente una mano detrás de ella que la jaloneó con fuerza hacia atrás.

-¡Ah!

Exclamó Bella asustada, agitando los puños y las piernas, preparada para luchar con todas sus fuerzas.

-¡Mira bien, soy yo!

Cuando escuchó la voz familiar de Pedro, Bella dejó de resistirse.

Levantó la cabeza y, efectivamente, vio el rostro de Pedro.

เป

Sin embargo, el lugar estaba bastante oscuro y las luces de la calle no eran muy claras, por lo que Bella no podía ver claramente la expresión de Pedro.

-¿Cómo has venido tú aquí? ¿Y dónde están ellos?

Preguntó Bella con el corazón aún palpitando, mientras miraba a su alrededor, pero no había rastro de los hombres.

-Se escaparon–dijo Pedro en tono grave-. ¿Qué estabas haciendo dando un paseo por este lugar?

Bella, que estaba muy nerviosa hace un momento, ahora se sentía aliviada y sus piernas temblaban ligeramente.Se sentó en una piedra cercana.

-Simplemente estaba caminando y terminé aquí, quién iba a saber que me encontraría con ellos. ¡Debemos llamar a la policía, rápidamente!

Dijo Bella mientras sacaba su teléfono. Pero Pedro intervino con frialdad: -No es necesario. En este momento, la policía no encontrará ninguna evidencia útil. Me ocuparé de esto y lo investigaré a fondo.

-¡Pero tengo evidencia! -Bella intentó levantar el papel, pero se dio cuenta de que sus manos estaban vacías.

Pedro notó lo que ella estaba pensando y explicó amablemente, algo poco común en él: -Ellos son expertos en esto. Tan pronto como vieron que algo andaba mal, tomaron el papel y huyeron. No te dejarían ninguna prueba.

Bella se dio cuenta de que estaba completamente concentrada en cómo sacar su teléfono para llamar a la policia y no había notado cómo le arrebataron el papel, ni siquiera se dio cuenta de que Pedro se acercaba.

-Volvamos primero.–instó Pedro.

Bella negó con la cabeza y dijo: -Espera un momento, necesito descansar un poco más porque tengo las piernas débiles por el miedo.

Pedro la miró y luego, sorprendentemente, se agachó a medias frente a ella.

Bella no podía creer lo que estaba pensando hacer.

¡Apúrate y súbete! -dijo Pedro impaciente.

Bella se quedó atónita y se apoyó en su espalda. Pedro sostenía sus piernas mientras la llevaba en su espalda hacia adelante.

Recordó que cuando era niña, su abuelo solía llevarla en su espalda. Tenía hombros anchos y una espalda cálida que le brindaba una sensación de seguridad infinita.

Ahora estaba acostada sobre la espalda de Pedro, que también era ancha y cálida. Podía oler ligeramente el suave aroma a cedro que desprendía.

Sus pasos eran firmes. Aunque ella no pesaba mucho, caminar con ella en su espalda durante tanto tiempo le hacía jadear un poco, pero él no la hizo bajar ni se quejó por la molestia. Continuó llevándola hacia adelante.

(Pedro, si tan solo pudieras tener tanta paciencia conmigo en la vida anterior.)

(No, ni siquiera necesitas tanta paciencia.>>

(Solo un poco menos de disgusto, un poco menos de frialdad. Si me hubieras tratado como a los demás, no sería tan obstinada, no habría sucumbido a la influencia y hecho tantas cosas locas.>>

(No habría sido atrapada y encerrada en un hospital psiquiátrico, ni habría terminado con el trágico destino de sufrir cáncer de estómago…)

-¿Estás llorando?

En ese momento, Bella escuchó la voz burlona de Pedro: -¿No eras capaz de morderme y golpearme? ¿Cómo es que te asustas tanto con solo un susto de ellos? Content © NôvelDrama.Org 2024.

Bella no sabía cuándo empezaron a caer lágrimas de sus ojos.

Se secó las lágrimas con el dorso de la mano: -Estoy bien, déjame bajar.

Al escuchar su voz claramente más fría y distante, Pedro giró la cabeza y la miró y dijo: ¿Qué pasa? Ya no me necesitas y quieres abandonarme. t


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